EXPERIENCIA LTH

Para nuestros antepasados los astros tuvieron un papel importante, se puede decir que miraban los movimientos del sol, la luna y las estrellas a través de sus construcciones y las sombras que proyectaban, para saber en qué época del año estaban.

De hecho, el calendario solar, uno de los inventos más importantes del mundo prehispánico, se realizó basándose en el paso del sol por las montañas.

También las antiguas ciudades mayas están orientadas respecto al movimiento de los astros. Los edificios importantes eran construidos con la intención de escenificar su cosmología, apoyándose en la trayectoria del sol y las distintas formas de sombras que se creaban sobre ellos.

A estos juegos visuales se les conoce como fenómenos arqueoastronómicos y los puedes encontrar en diversas culturas del planeta, pero no en cualquier época del año. En nuestro país existen diferentes zonas arqueológicas en donde se pueden apreciar durante los equinoccios y solsticios.

Los equinoccios se presentan dos veces al año, el de primavera el 21-22 de marzo y el de otoño el 22-23 de septiembre, cuando los rayos del sol caen verticalmente sobre el ecuador. Los solsticios también se dan dos veces al año, el de verano el 21-23 de junio y el de invierno el 21-22 de diciembre, y sucede cuando el eje de la tierra se encuentra inclinado, por lo que los rayos solares caen verticalmente sobre el trópico de Cáncer o de Capricornio.

En la península de Yucatán, como en el estado de Chiapas se encuentran muchas zonas arqueológicas donde se aprecian estos fenómenos. También es posible visualizarlos en diversos puntos del Valle de México. Por eso, te compartimos algunos de los lugares que puedes visitar para observar los diferentes fenómenos de luz y sombra durante el solsticio de invierno.

Ciudades Maya

En la mayoría de las ciudades mayas podrás encontrar algún referente visual durante esta fecha, incluso algunas zonas arqueológicas extienden sus horarios para que puedas presenciar estos fenómenos.

Chichén Itzá

Qué mejor lugar para recibir el solsticio de invierno que al pie de la mística pirámide de Kukulcán en Chichén Itzá. En esta fecha el costado Poniente y Sur se iluminan por completo, mientras que los lados Oriente y Norte están sombreados. Este lugar es uno de los escenarios con mayor significado astronómico, cultural e histórico en todo el mundo.

Dzibilchaltún

Esta antigua ciudad maya es un lugar mágico para los amantes de los fenómenos arqueoastronómicos. Durante el equinoccio de primavera y otoño el sol se puede ver perfectamente a través del Templo de las Siete Muñecas. Aunque en ocasiones, si las condiciones climáticas lo permiten, también se puede apreciar durante el solsticio de invierno. Dentro del recinto también se encuentra el cenote Xlacah, donde podrás darte un baño en sus cristalinas aguas.

Mayapán

Este recinto es considerado como la última capital de las ciudades-estado de la península de Yucatán y pasa desapercibida para muchos viajeros. Como muchas ciudades mayas, este lugar también fue construido teniendo en cuenta la importancia de la cosmología, por eso, aquí también se puede observar la bajada de la serpiente de Kukulcán como en Chichén Itzá durante los equinoccios y los solsticios. Además, es un lugar excelente para experimentarlo ya que es muy cómodo de visitar.

Oxkintok

Considerado uno de los asentamientos más importantes del norte de Yucatán y una de las ciudades más antiguas de la región Puuc central. A esta zona arqueológica se le conoce también como la ciudad de los tres soles de piedra y cuenta con un diseño arquitectónico único y sobresaliente. Durante el solsticio, los rayos del sol atraviesan el arco de piedra de este lugar para marcar el inicio del invierno.

Valle de México

En 1993, los investigadores Franz Tichy y Johanna Broda realizaron una línea solsticial formada por Cuicuilco, Xochimilco, Acalpixca, Teutli, Tecómitl, llegando al Popocatépetl. La otra línea que propusieron está formada por Chapultepec, Iztacalco, Tlapacoya y llega al volcán Iztaccíhuatl.

Cerro Xochitepec

Este ha sido muy poco estudiado a pesar de que en la cima se encuentran restos de una estructura indígena y sobre ella una gran cruz cristiana. Desde este punto se puede observar la salida del sol exactamente atrás del cráter del Popocatépetl.

Cerro de Chapultepec

Dentro del castillo, donde existió una ermita dedicada a San Miguel Arcángel y mirando hacia el volcán Iztaccíhuatl, se puede ver la salida del sol sobre el abdomen de “La mujer dormida”.

Además de estos sitios, existen otros puntos donde se puede apreciar el inicio del invierno. Te invitamos a visitar alguno de estos lugares para que puedas apreciar mejor los increíbles fenómenos arqueoastronómicos.

Fuente: elcaminomascorto.es / Novedades Yucatán /